A un sistema disperso (sólido-líquido)
se le denomina suspensión (sistema de dispersión gruesa) si la dimensión media
de las partículas sólidas es mayor que 10 μm.
En las dispersiones gruesas, donde las
partículas son de tamaño relativamente grande, el área superficial total de la
fase sólida tiene poca significación, es decir, el efecto de las propiedades superficiales
es prácticamente despreciable.
Las partículas ordinarias se distinguen
a simple vista, por lo tanto, es un sistema heterogéneo (es difásico) a nivel
microscópico y a simple vista. En la Figura que está a continuación se muestra
el agua turbia.
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